Hoy, después del descanso científico del viernes pasado, por motivos carnavaleros,hemos vuelto a nuestro particular laboratorio y hemos experimentado con líquidos de distintas densidades y cómo los objetos se hunde o flotan en ellos.
FLOTAR O NO FLOTAR...
Todo esto sucede gracias a la densidad. Las diferencias en la densidad de los cuerpos se deben a la organización de la materia que los constituye. Así, por ejemplo, los sólidos son en general más densos que los líquidos, y éstos son más densos que los gases.
En esta actividad, el agua flota sobre la miel, pero se hunde en el aceite. Los tres líquidos quedaron ordenados de arriba hacia abajo, de más a menos densos.
Por otro lado, los líquidos ejercen sobre los cuerpos sumergidos en ellos una fuerza en sentido contrario al peso, llamada empuje. El empuje será mayor cuanto mayor sea la densidad del líquido.
¿Hemos aprendido algo de nuestros científicos?
Ellos han dibujado los resultados de lo que han entendido y aquí tenéis un ejemplo.
